Los extraordinarios retratos florales de Jonathan Singer se cuentan entre las obras maestras de la fotografía botánica. Para poder reflejar fielmente las formas y colores de sus modelos, este artista estadounidense ha seguido las técnicas de composición e iluminación de genios de la pintura como Rembrandt, Brueghel o
Vermeer.
Para Singer, el objeto de su obra, que define como una fusión de arte y ciencia, es que el espectador reflexione sobre la necesidad de preservar la biodiversidad de los ecosistemas.
La tecnología digital permite "captar imágenes taxonómicamente perfectas, tanto en las formas como en los colores", dice este fotógrafo.
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